Un premio Nóbel de la Paz consigue que, atendiendo a sus órdenes, se mate a una persona y miles de personas lo celebran en las calles como si se acabara de declarar el pleno empleo mundial o el fin de la inanición...
...y algunos incluso son universitarios, como podemos ver en este vídeo titulado "Osama Bin Laden está muerto - celebración en la Universidad del estado de Pensilvania - bandera estadounidense".
A kilómetros de distancia pero en la misma línea de catetismo moral (con un océano de por medio) a unos con un status un poco superior en vez de matarlos los ilegalizan.
¿Que esto no tiene que ver con medicina? ¿que tampoco con salud? Bueno, todo empieza con un muerto, y de eso es de lo que solemos hablar aquí.
La violencia solo genera violencia.
ResponderEliminarSi conviertes a un genocida en un mártir, das pie a que sus seguidores se radicalicen más, incluso aumenten el número de sus integrantes.
Si además te regocijas con su muerte, das pie para que se genere un clima de venganza de resultados imprevisibles.
¡Cuidado con el prestigio de los Noveles de la Paz!.
¡Como dijo @doctorcasado, un fin de semana completamente medieval!
Demencial.
ResponderEliminarEmplear el lenguaje de manera suficientemente ambigua para que matar sea pacificar, para salir a festejar y para arrojar cadáveres al océano (que parece ser capaz de tragárselos todos).
No sé, yo creo que a la mayoría de los universitarios que hay ahí lo de Bin Laden les importa un pepino.
ResponderEliminarEstán a ver si pillan con la rubia/rubio de clase que les gusta aprovechando la confusión alcohólica.
A mí, humanamente, me ha parecido muy doloroso este tratamiento de la muerte de una persona, el encarnizamiento de los discursos y las imágenes festivas. Nunca pensé que nuestra sociedad pudiera acompañar así una noticia de un fallecimiento ¿nos estamos volviendo locos? Esta gente se ha igualado, a mi modo de ver, a todos los terroristas y fundamentalistas del mundo, qué verguenza...
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