Señor empleador, seguramente a usted no le interese leer este curriculum, pero es el que realmente tiene algo de sentido.
Sé algo de medicina y mucho de sonreír. Presto atención a quien me habla y a quien pasa por detrás de esa persona para que su mirada de saludo no se pierda en el vacío.
Paso por la sala de espera intentando que ese "Buenos días" vaya seguido del nombre de la persona que viene a visitarme...al fin y al cabo ellos sí que suelen saberse mi nombre.
No sé cuándo aprendí que era más importante dar la mano que la razón, creo que fue mi tutor el que me lo enseñó sin explicármelo, como tantas otras cosas.
Me gusta ir a los domicilios a ver a los pacientes antes de que llegue el mediodía y las tiendas cierren para ver la casa con la vida del barrio. Disfruto cuando tras la puerta hay un gran pasillo lleno de fotos y confieso que intento ir detrás de quien me guíe por la casa para poder mirar de reojo los retratos y cuadros (incluidos los escudos del Betis o las estampitas de la Macarena).
Cuando fallece un paciente le doy las gracias a la familia por el acompañamiento que han hecho a su familiar. Eso también lo aprendí de otro maestro.
Sé calentar las manos y el fonendo antes de que entren en contacto con la piel del paciente.
Tiendo a pensar que cuando algo fue bien se debió principalmente a la actuación del apciente y su entorno; cuando va mal suelo creer que expliqué mal la actitud a seguir o impuse (ese es el problema "impuse") un régimen terapéutico que era un sinsentido. Sé que no siempre son así las cosas, pero es una forma de mantener los pies en el suelo y no acabar caminando un palmo sobre él.
Siento como individualizadas cada una de las veces que repito una explicación (esquematizada en mi cabeza) o un plan de tratamiento (mil y una veces repetido).
Digo mucho "no lo sé". También digo "creo que eso no debería importarnos, pero si a usted le importa intentaré buscar la explicación a ese problema".
Intento no perder el sur buscando el norte.
Entre mis puntos flacos tengo que no sé cuidar de las plantas. Hay quien dice que el médico que no sabe cuidar de las plantas no sabe cuidar de sus pacientes...tal vez sea verdad, si es así soy capaz de convertirme a la jardinería con todo mi empeño. No es una cuestión de falta de aptitudes (creo), sino de que siempre fui más de raíces que de ramas, pero a veces me cuesta verlas, y si están cubiertas de tierra esa dificultad puede acabar por hacerme desistir en su cuidado.
Este es mi curriculum, y si no le gusta no tengo otro.
FIN de la especialidad. [en 48 horas]
Yo le contrataría ^^
ResponderEliminarUn beso!
Uff qué cuenta atrás.
ResponderEliminarFelicidades por terminar la especialidad. Espero que todo te vaya bien.
Es una pena no ser gerente de algún sitio, sólo por poder darme el gustazo de contratarte. Enhorabuena y mucha suerte.
ResponderEliminarenhorabuena por la entrada y por lo que deja ver de ti como médico y persona
ResponderEliminarmucha suerte y sobretodo que no cunda el desanimo tal y como estan las cosas en España y en Sanidad
:)
ResponderEliminarpoco más puedo añadir
Puedes añadir que mucha gente, incluido yo, te consideramos un ejemplo a seguir.
ResponderEliminarSalud.
Javier, eres uno de los grandes de esta cosa. Mucha suerte porque será tambien para nosotros
ResponderEliminarMucha suerte, que aunque sea por las raíces, darán sus frutos.
ResponderEliminarEste país no puede desaprovechar esta generación de médicos de familia.
ResponderEliminarEres una buena persona y seguro q tb serás un buen profesional. Personas como tú son las q hacen falta. Ánimo!
ResponderEliminarMe gustaría decir algo parecido cuando acabe con estos cuatro años que prometen ilusión (con alguna diferencia , aunque espero que sean las menos posibles). Siempre es ilusionarte leerte...
ResponderEliminarLa Medicina con las 4H de Osler: Humildad, Honestidad, Humanidad y Humor
ResponderEliminarBienvenido Javier, nos das hoy una buena lección.
ResponderEliminarLos Jedis no necesitan curriculum.
:)
Verdaderamente abrumado por vuestros comentarios... Un fuerte abrazo a cada uno
ResponderEliminarQue bonito Javier... Contratado!!!!
ResponderEliminarJavier, una pena que no tengas en la puerta 10 gestores intentado llevarte con ellos.
ResponderEliminar¿no te gusta la investigación?
.
ResponderEliminarAy si pudiéramos elegirnos los compañeros del C de Salud!
Bueno, al menos espero seguir disfrutando de tu blog
Gran Curriculum
ResponderEliminarFelicidades, Javi.
ResponderEliminarNo sabes cuánto inspiras a los que caminamos unas baldosas por detrás de ti.
Te deseo lo mejor. :)
Como paciente (muy paciente, quizás "demasiado") quiero una vez más daros la enhorabuena, a la página y al autor de esta magnífica entrada. Desde que os descubrí procuro seguiros en la medida de mis posibilidades, y me hace feliz pensar que la nueva generación de profesionales que nos aguarda acabará con los grandes dinosaurios que ahora nos invaden y luchará por lo importante: una relación médico/paciente de calidad.
ResponderEliminarDE NUEVO, ENHORABUENA POR TU CURRICULUM!!!!
SALUDOS!!!! (agradecidos),
Mar.
Enhorabuena Javier.
ResponderEliminarCreo que somos de la misma escuela, y eso me gusta.
Me gustan las 4 Hs de Osler (que no conocía) y me gusta que en las nuevas generaciones de médicos se trasnmitan los valores que mi madre, que no es médico, una vez me resumió. "Primero intentar curar. Si no se puede, consolar. Y por último acompañar." Intento hacer las tres cosas a la vez cuando hay patología.
En tu curriculum -por lo que he leído en blog y tweeter- añadiría: "ejemplo a seguir" y algo tan importante como "pienso sobre los pacientes y sé reflexionar".
ResponderEliminarAlgún día pagarán en el sistema público por algo más que la sumisión.
Un abrazo, suerte y que la fuerza yte acompañe