7.5.13

Cuando la participación empieza por una consulta


Estos días tiene en Madrid una consulta por la sanidad pública bajo la pregunta "¿Está usted a favor de una sanidad de gestión pública, de calidad y universal, y en contra de su privatización y de las leyes que lo permiten?"(1).

Algunos han llamado "antidemocrático" a este acto de consulta popular, pero si vamos un paso más allá tal vez deberíamos preguntarnos: ¿participa la población en la confección de nuestro sistema sanitario? ¿por qué no se integran modelos de participación ciudadana continua -más allá de los votos cada cuatro años- que permitan a los gobiernos saber qué servicios públicos quiere priorizar la población?

En un momento en el que se toman decisiones buscando la rentabilidad en el corto plazo (para poder pasar por encima de objetivos de déficit y demás convenciones económicas) se toman decisiones que pueden ser legales pero están desvestidas de toda legitimidad al llevarse a cabo marginando el proceso de participación social. Es necesario articular mecanismos de respuesta colectiva participativa, real, influyente y que pueda ser evaluada. Una participación que permita responder de forma informada y colectiva a la pregunta "¿qué sanidad nos podemos permitir? ¿ante qué otros componentes del gasto público queremos priorizarla? ¿cómo vamos a conseguir configurar ese sistema sanitario?" (2).

Dejar de pensar lo público como aquello perteneciente al Estado (viéndolo en tercera persona inerte) y empezar a pensar lo público como aquello común, perteneciente al ciudadano (con una concepción amplia del concepto de ciudadanía, claro está) es el único camino para que la construcción de los servicios públicos no sea una tarea inútil.

Esta mañana el consejero de sanidad de la Comunidad de Madrid ha hablado de la consulta por la sanidad pública calificándola de "parodia". Parodia es tomar decisiones sobre los trabajadores sin hablar (ni escuchar) con los trabajadores. Parodia es utilizar los mecanismos de poder público para impedir acciones de protesta y propuesta. Parodia es ser el sucesor de una saga de consejeros con claros intereses personales en la privatización de la provisión sanitaria y negar que esos conflictos de intereses hayan influido en algún momento en la confección de la gestión de la sanidad madrileña. Parodia es que los datos que fundamentan tus decisiones estén construidos con plastilina. Parodia es que en el momento de los últimos 80 años en el que mayor movilización colectiva y participativa está habiendo nos permitamos el lujo de darle la espalda y minimizar su significado, su acción y sus sugerencias... y es que...

... parodia eres Tú.



(1) yo habría quitado lo de "de calidad", porque nadie se va a posicionar en contra de la calidad del sistema sanitario, en cambio en contra de la gestión pública y de la universalidad del sistema sanitario está claro que ya hay quien se ha posicionado.
(2) muchas de estas ideas surgen a partir de algunos puntos de la intervención de Joan Josep Artells en el IX Simposio de la Sociedad Española de Atención al Usuario de la Sanidad, con el cual tuve la suerte de compartir mesa de debate.

1 comentario: