19.8.13

La desfuncionarización, la esencia de la privatización de la gestión de la sanidad pública

El Mundo: "Lasquetty: 'Es ineficiente un sistema basado en funcionarios vitalicios'"
Europa Press: "Rosell aboga por quitar 'algunos privilegios' a los indefinidos"

El siguiente asalto del combate sanitario (y de los servicios públicos en general) se librará en la condición laboral de los profesionales con plaza fija. Ya lo decían José Mª Abellán y Fernando I. Sánchez en un artículo en el blog "Nada es Gratis": "¿Por qué lo llaman gestión privada cuando quieren decir desfuncionarización?"; lo que busca la extensión de los modelos de gestión privada es la destrucción de la condición de estatutarios y funcionarios de los trabajadores sanitarios y su conversión en otra cosa...

... pero... ¿qué otra cosa es la que se busca? Curiosamente cuando se habla de los "privilegios" (léase con millones de comillas) de los funcionarios (y aquí incluyo a estatutarios y demás) nunca se habla de que en el panorama laboral de nuestra sanidad cada vez son menos, incrementándose de forma alarmante los trabajadores eventuales con contratos parciales (en Andalucía se ha generalizado la contratación de los eventuales al 75% del total de la jornada laboral, con renovación de mes en mes -exceptuando los meses de verano-) o con contratos entre semana dejando libres los fines de semana sin cotizar (Madrid podría escribir una tesis con estas experiencias).

El sistema sanitario español ha conseguido, a nivel macro, unos buenos resultados sanitarios, especialmente si los comparamos con otros países con nuestros mismos condicionantes socioeconómicos... ¿por qué motivo parece ahora que el principal enemigo de la viabilidad de este sistema es la estabilidad laboral de sus trabajadores? ¿por qué ninguno de los actores políticos y empresariales que abogan por la desfuncionarización ha sido capaz de articular un modelo alternativo que no convierta este cambio en un paso hacia la precarización laboral? (en el ámbito académico sí que hay muestras de esto, y es que hay modelos de estabilidad y motivación más allá del funcionariado, está claro y lo hemos defendido también en este blog en ocasiones anteriores) ¿de qué manera se puede decir que "el funcionariado es desmotivador" mientras se imponen medidas que sólo trabajan por fomentar la motivación extrínseca -a golpe de talonario- y no la intrínseca? (recordemos este artículo sobre incentivos monetarios).

En el escenario actual (enfrentamiento entre trabajadores y directivos sanitarios, sombras de corrupción y prevarización en las adjudicaciones de las concesiones de los modelos de gestión privada, ...) es complicado pensar que un modelo mejorado de relaciones laborales vaya a salir de los actuales dirigentes sanitarios, deslegitimados por carecer de la excelencia profesional y formativa que exigen. Se puede leer a Vicente Ortún defender la desfuncionarización (página 167) con argumentos, con fundamento y abierto al debate, pero Lasquetty y Rosell no parecen los voceros más autorizados para hablar del tema... sus conflictos de intereses les llenan de incoh€r€ncia las gargantas.

4 comentarios:

  1. Los modelos alternativos reciben ataques por doquier... el modelo catalan de EBA (parecido al NHS) era "bueno" hasta que se puso en la mesa, quizás mal explicado, y entonces pasó a ser malo.

    La sociedad sigue asociando sanidad publica con funcionario/estatutario, nos guste o no.

    Por otra parte, ¿crees que hay pocos fijos? El porcentaje es bastante elevado todavía.

    Feliz verano!

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  2. Ya cuando se instituyeron las fundaciones sanitarias en galicia se decía que la finalidad última era la laboralización de todos los trabajadores (y la externalización de los servicios de estructura y no clínicos) lo que acabó pasando fué que los mismos que crearon aquel "mundo aparte" lo liquidaron INTEGRANDO como funcionarios a personal laboral... con la adquiesencia sindical.

    La verdad es que entre la absoluta arrogancia y la absoluta precariedad debería existir el término medio pero a nadie parece interesarle... Los argumentos del señor Ortún siguen siendo válidos.

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  3. Ms alla de los motivos que realmente mueve a nuestros "estadistas" y de que sus acciones siguen una ideologia concreta no neceriamente al servicio de los ciudadanos sino de conceptos superiores como "la economia", "la eficiencia" o la "productividad", bien aprendidas en las escuelas de negocio, la verdad es que la plaza fija, funcionaria o estatutaria, es el mayor desincentivo posible.
    Obviamente la falta de incentivos en los profesionales del sistema acabara con el sistema pero una cosa es el incentivo y otra la plaza fija.
    No hace falta tirar de mucha estadística para darse cuenta de que hay un porcentaje realmente significativo de gente con plaza fija y actitudes intolerables en cualquier sistema, pero especialmente en el sanitario. Y eso no es culpa solo del sistema de incentivos positivos, sino de la ausencia total de incentivos negativos, de penalizaciones.
    Yo creo que el sistema sanitario puede aprender bastante de la política sobre ciencia (más allá de nuestro país) y darse cuenta de que estabilidad no es igual a plaza fija,que movilidad no es igual a precariedad y que ganarse la plaza en cada convocatoria no está reñido con una aceptable calidad de vida laboral.

    Pero no se si nuestros consejeros de Sanidad están pensando exactamente eso....

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