[Con intención de reactivar la economía y la marca España andamos en reformas. Disculpen si le desahuciamos, expropiamos o simplemente le jodemos. Mientras seguiremos hablando..]

9.2.11

yo y mis relaciones fraternales

Representante farmacéutico (RF): "Hola, doctor, puedo presentarle un momento unas cosillas?"

Javi (J): Hola, mi nombre es Javier, soy el residente de XXXXX, y la verdad es que no tengo costumbre de recibir a los representantes farmacéuticos.

RF: Ah...eh... bueno, ¿le importaría que le preguntara por qué?

J: No, claro que no me importa, no los recibo porque considero que mi formación sobre medicamentos ha de ser independiente de la industria en la medida que esto sea posible; además, como estoy en horario de trabajo y me están pagando por ello, creo que debo invertir este tiempo en hacer cosas relacionadas con mis pacientes o formándome de otra forma.

RF: Ah, vale, muy amable.

J: Igualmente, hasta luego.

6 comentarios:

miguel dijo...

Haciendo amigos! La sinceridad por delante...

Jose Valdecasas dijo...

Genial.

javierpadillab dijo...

Miguel, al principio de la residencia estas situaciones me parecían superincómodas y las trataba de evitar de cualquier manera (haciendo que hablaba por teléfono y cosas así), pero luego me di cuenta que para una cosa que estaba convencido, tenía que hacerla con determinación.
Además, con una sonrisa y un argumento es difícil que nada salga mal... :)

Emilienko dijo...

Yo, como te he comentado en ocasiones, sí los recibo y les escucho.

Después les comento por qué prescribo o no su fármaco.

Comenté con Andrés que algunas cosas son difíciles de conocer por la literatura y que pueden ser de ayuda a mis pacientes.

No lo considero perder el tiempo de trabajo.

javierpadillab dijo...

Emilio, seguramente también sería útil para mis pacientes que dedicara una parte de mi tiempo de consulta a tallar bastones de madera para que cuando llegaran a mayores evitaran alguna caída; de hecho, es probable que de esta manera evitara más fractura de cadera, muñeca o brazo que prescribiendo bifosfonatos... aún así no lo hago, tardaría demasiado para obtener un resultado positivo (excluyendo mi torpeza innata, claro).
Alguna vez te he leído que uno d elos valores añadidos que encontrabas en escuchar a los representantes era que te informaban de nuevas formulaciones o presentaciones de sus fármacos. Exactamente eso aparece en la revista IT del Ministerio de Sanidad (suscripción online gratuita; ya no se imprime) y en la base de datos de medicamentos de Diraya...
Por otro lado, la influencia del contacto profesional médico-representante es algo más probado que lo contrario, por lo que la exposición ya es un valor comercial para la industria, incluso la exposición desde la crítica...

Un abrazo, Emilio, y gracias por comentar!

Jose Valdecasas dijo...

Yo ya no los recibo. Sí considero que son una pérdida de tiempo y me temo que distorsionan mi juicio crítico hacia sus productos con información sesgada. Me temo que es mejor (aunque posiblemente más trabajoso) buscar la información en fuentes independientes.

Si cuando veo Mad Men, The Wire o Hijos de la Anarquía no me gustan los anuncios, ¿por qué los tengo que escuchar, y encima con cara de interés y respondiendo a sus preguntas, en horario de trabajo?

Saludos.