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by pkuczy |
Contra esa frase decidí hacer mi residencia. Me quedan 40 días para acabarla y durante estos 4 años creo que puedo dar fe de que NO hace falta la industria farmacéutica para formarse. NO como agente de organización de eventos de formación continuada. NO como editora de libros de dudoso valor científico (e indudable valor comercial).
Cuando comencé la residencia comenté en varios círculos personales y profesionales que si al terminar este periodo de 4 años alguien me demostraba que estaba peor formado que aquellas personas que han recorrido un camino paralelo al mío pero manteniendo estrechas relaciones con la industria daría la razón a los defensores a ultranza de la suma importancia de la industria farmacéutica en la formación médica de calidad. Pero creo que no ha sido así.
Desde un primer momento dije a los representantes de la industria que no les iba a recibir, les explique mis motivos y lo cierto es que desde el primer mes disminuyeron notablemente los intentos por mostrarme su publici... información. De esta negativa al contacto he hecho mi bandera que he tenido la oportunidad de exponer y debatir allá por donde he ido (centro de salud, hospital, centros de especialidades...).
Este camino en busca de la independencia como principio rector de mi formación me habrá llevado, seguramente, a perderme comidas en restaurantes de postín (también llamadas "simposio de actualización de noséqué) y semanas en la play...en congresos científicos que, siendo sinceros, no me interesaban lo más mínimo. A cambio, es este camino el que me ha llevado a millones de fuente de formación e información que no dependen de tener que sonreír a nadie.
El New England Journal of Medicine publicó un artículo hace dos semanas llamado "Industry support of CME - Are we at the tipping point?" (en la página de NoGracias se puede leer un comentario de Galo Sánchez al respecto, más-que-recomendable-) donde hablan de la posibilidad de que un cambio de ciclo esté llegando en la relación entre industria farmacéutica/diagnóstica y la formación médica continuada... Un cambio que se notaría, seguramente, no sólo en quién-paga-qué, sino, especialmente, en los contenidos y rentabilidad científica de los eventos.
como ya dijimos una vez, caminar en sentido contrario siempre permitió mirar a la gente a la cara.